LAS PERSONAS

DOS ALMAS, UNA FAMILIA: LA MÁGICA ALQUIMIA DE LOS OPUESTOS

ANTONELLA DI TONNO

Polifacética, auténtica y acogedora, tal y como su tierra. En su familia hay dos cosas que son sagradas: la cocina y el vínculo visceral y profundo con su tierra, los Abruzos. Su arte es la de ser siempre capaz de resolver los problemas más diversos. La excelencia es el faro del que nunca aparta la mirada, tanto por lo que hace su vida del día a día como por lo que produce. Con una formación académica científica a sus espaldas, siempre le ha fascinado automatización en los procesos de producción y, sobre todo, la relación y la interacción que hay entre el hombre y la máquina, una relación en cuyo misterio le gustaría poder adentrarse. Al hombre el pensamiento, a la máquina el poder de hacerlo manifiesto. Su objetivo: crear la botella perfecta para beber en compañía de sus hijos cuando sean mayores o de sus padres cuando vuelvan a encontrar el norte en sus vidas (son abstemios). La sensibilidad de Antonella sorprende y desarma a todo aquel que la conozca.

RODRIGO REDMONT

Incansable trotamundos con mil y una facetas, encarna a la perfección el dicho de Heráclito "pánta rheî": "todo fluye", porque todo cambia. Y la idea de cambio remite a la de crecimiento, el desarrollo, la mejora, el progreso. De su familia hereda valores fundamentales como la verdad, el honor y la visión de futuro. Tendría que haber sido reportero si no hubiera encontrado su "título sensacional" en la Meca de la gastronomía: Italia, la cuna de la excelencia culinaria, la Bota que recorre el mundo difundiendo un sinfín de delicias, ¡entre ellas nuestros vinos! Ferviente investigador de la relación entre el hombre y la madre naturaleza, le apasiona deleitarse con los placeres de memoria epicúreos, disfrutando de la botella de vino perfecta con un poco de Soul o Bossa Nova de fondo.

Fascinados por el extraordinario potencial de esta región y unidos por un mismo sueño, ambos constituyen ahora la familia que dirige la empresa.

LA REGIÓN DE LOS ABRUZOS

Un tesoro por descubrir, los Abruzos. Una región misteriosa e incontaminada donde la naturaleza, el arte y la historia se entrelazan para crear una realidad con una fisonomía inconfundible. Porque hablar de los Abruzos es hablar de la Naturaleza por encima de todo. Es hablar de su mar, de sus playas, de sus montañas, de sus parques nacionales. Es afirmar que es la joya de la corona de los destinos naturales.

Pocos saben que, a sólo dos horas de Roma, se encuentra la región más verde de Europa, ocupada en más de un tercio por cuatro parques nacionales. Inmersos en esta tierra virgen (aún ajena al turismo de masas y a la industrialización desenfrenada) cientos de castillos y abadías funden su encanto con la riqueza de la cultura enogastronómica local. De hecho, es aquí donde se encuentran las principales marcas de pasta del mundo.

La de los Abruzos es una historia turbulenta, hecha de luchas y peregrinaciones. Primero la conquista romana, que dividió el territorio en dos. Después, la caída del Imperio y la llegada de nuevas potencias: bizantinos, longobardos y francos. Con los normandos en el poder, los Abruzos pasaron a formar parte del Reino de Sicilia cuando un emperador, Federico II, llegó para reunificar lo que había quedado dividido y fundar una nueva ciudad: L'Aquila.

LORETO APRUTINO

Encaramado en lo alto de una colina, hay un pueblo de otra época. Una pequeña y preciosa perla, enclavada entre Pescara y el macizo del Gran Sasso, entre las más hermosas de Italia. Justo aquí, en estas colinas bañadas por las aguas del Tavo, se alzaba antaño la ciudad romana de Lauretum, entre las vastas extensiones de olivos y los fragantes laureles de los que tomó su nombre. Desde el punto de vista arquitectónico, el antiguo pueblo ha conservado intacto su típico aspecto medieval: una maraña de callejuelas sinuosas y casas adosadas, culminadas por la Fortaleza de Chiola, que se alza sobre la ciudad y cuya presencia se atestigua ya en el año 884. Fue en 1863, tras la Unificación de Italia, cuando Loreto Aprutino adquirió su doble nombre, para diferenciarse de otras localidades homónimas. Pero para rastrear sus orígenes es necesario remontarse milenios atrás, como atestigua el descubrimiento de una necrópolis que data del siglo IV a.C. en Colle Fiorano.

COLLECORVINO

La presencia normanda en el sur se prolongó durante dos siglos, del XI al XII, alternando batallas encarnizadas y la aparición de conquistadores independientes. A menudo se trataba de esos peregrinos normandos que regresaban de Jerusalén. Una vez unificados, estos territorios se fusionarían posteriormente en el Reino de Sicilia, formado por la isla del mismo nombre, el sur de la península, el archipiélago de Malta y parte del norte de África. Los mercenarios normandos, tras haber luchado al servicio de lombardos y bizantinos, empezaron a crear sus propios feudos y estados. En cincuenta años, tras reunificar las tierras bajo su control, conseguirían finalmente la independencia. Collecorvino se anexionó al condado de Loreto en 1071, formando así un único feudo, que pronto se convirtió en el bastión de las posesiones del conde de Loreto y en el baluarte de la línea defensiva normanda.

DIVISIÓN EN PARCELAS

Cada parcela se vinifica por separado y se analiza desde el principio del proceso de producción hasta su final. Para definir los límites y elegir las vides más adecuadas, tenemos en cuenta una combinación de factores: la constitución del suelo, su composición química, la exposición (la orientación de las hileras con respecto a la luz solar), la pendiente (la inclinación vertical, que afecta al drenaje del agua) y las condiciones climáticas del lugar. Así se crea una simbiosis arcana, fértil y perfecta entre nuestras vides y el suelo, de modo que las características de las uvas derivan directamente de las del terroir del que proceden. No se trata de modas pasajeras, sino de una esencia permanente, duradera. Cada porción tiene su propia historia geológica, y de historias diferentes surgen aromas, perfumes, sensaciones diferentes. Nuestros viñedos, plantados en 1973, se extienden sobre un total de 30 hectáreas, adentrándose en los territorios de Collecorvino y Loreto Aprutino.

VINIFICACIÓN

• HIPER-REDUCCIÓN •

La técnica de vinificación " en reducción " garantiza que nuestros blancos y rosados liberen todos sus aromas y su frescura, respetando plenamente las características de cada variedad de uva. Durante el proceso y, en particular, en la extracción del mosto, utilizamos gases inertes como el CO2 para prevenir cualquier riesgo de oxidación.

• MICROOXIGENACIÓN •

Añadiendo hábilmente oxígeno durante el proceso de elaboración del vino tinto, obtenemos vinos con un sabor más elegante y equilibrado: mantenemos intacto su color y realzamos su bouquet, limitando las notas más agresivas.

NUESTROS TERRENOS

Las características de un vino dependen sobre todo del tipo de suelo en el que está plantado. La diferente combinación de sus elementos (caliza, esqueleto, arcilla, limo, arena), se corresponde con las distintas cualidades organolépticas del producto final: su color, su aroma, su sabor. Hablar de la naturaleza del suelo nos lleva al concepto más amplio de “terroir”: la anatomía de un territorio, su carácter específico, una amalgama de varios factores. Así pues, la conformación de nuestros terrenos, el marco natural en el que se inscriben y la acción del clima contribuyen a la singularidad de unos vinos que no pueden producirse en ningún otro lugar, y que son el resultado directo de la tierra de la que proceden.

Una franja de costa dominada por el joven e imponente macizo de los Apeninos: así debió de verse la región de los Abruzos en el Plioceno. De estos colosos brotaban ríos como el Tavo, que arrastraban detritos que, al depositarse, darían lugar a nuestras colinas, resultado de la sedimentación de arcillas finas y, más tarde, de limos y arenas. Al adentrarnos en el Pleistoceno, la era de las grandes glaciaciones, el lento e inexorable trabajo de los glaciares y el ímpetu de los ríos que surcaron los profundos valles modelarían definitivamente el paisaje, confiriéndole un aspecto similar al actual. Y es precisamente en la vertiente izquierda de uno de estos valles, el del Tavo, donde se extiende hoy el territorio de nuestros pueblos, Loreto Aprutino y Collecorvino, entre 150 y 350 metros sobre el nivel del mar.

ECOSOSTENIBILIDAD

Ecosostenibilidad: una palabra cuyo significado difícilmente es unívoco para todos. Aquí, en Colle Corviano, hemos decidido darle un significado muy preciso, concreto y no negociable. Un objetivo, un ideal, una misión. Pero no solo eso. Porque la ecosostenibilidad es, ante todo, nuestra forma de vida, y no se limita a preservar, respetar y revalorizar los recursos de nuestra tierra. Caminando entre las hileras de viñas de la finca, uno capta enseguida lo que la palabra "ecosostenibilidad" significa para nosotros. Es adoptar prácticas que garanticen la alta calidad de nuestros vinos y mantengan los viñedos prósperos y productivos a largo plazo. Es minimizar el impacto medioambiental, con métodos elegidos específicamente para preservar los recursos naturales y reducir los desechos, los desperdicios y la contaminación.
Mejorar el hábitat en el que vivimos significa cuidar la salud del suelo y de las plantas, garantizar la eficiencia y la eficacia de los procesos de producción y reducir drásticamente los desperdicios.

• RESPETO DE LOS RECURSOS HÍDRICOS •

No recurrimos a ninguna forma de riego para reducir el desperdicio de agua.

• FUENTES DE ENERGÍA EFICIENTES Y EFICACES •

Nuestra energía procede al 100% de fuentes renovables y se produce en los parques eólicos de nuestra zona.

• AGRICULTURA RESPONSABLE •

Para nosotros, la salud de nuestro ecosistema es muy importante. Para protegerlo, reducimos los tratamientos a lo indispensable, y cada planta de vid recibe cuidados y un seguimiento continuo para que, creciendo sana y fuerte, pueda desarrollar sus defensas naturales contra insectos, plagas y enfermedades. Nuestra atención a la biodiversidad pretende crear un hábitat favorable para la fauna local, favoreciendo la presencia de aves rapaces.

• CUIDADO DEL SUELO •

Para que un viñedo goce de buena salud, es esencial preservar la naturaleza del suelo y proporcionarle la nutrición adecuada. Entre nuestras hileras y alrededor del viñedo hemos procurado plantar especies vegetales que ofrezcan a los insectos un lugar ideal para vivir, alimentarse y reproducirse.

• GESTIÓN DE RESIDUOS •

Desde 2007, reciclamos todos los desechos producidos en nuestros viñedos. Todos los residuos de los procesos de fermentación del vino, como semillas y pieles de uva, se reutilizan para crear compost con el que fertilizar el suelo. Además, nuestras botellas de vidrio son más ligeras, reduciendo así las emisiones de gases de efecto invernadero.

• NUESTRA COMUNIDAD •

Formar parte de una comunidad también significa contribuir activamente a su progreso y crecimiento. Por eso ayudamos a reparar las carreteras municipales, promocionamos nuestra región y fomentamos el turismo. Promovemos activamente aquellos valores que para nosotros son irremplazables: el amor por nuestra tierra, la pasión por nuestro patrimonio agrícola y el consumo responsable de vino.

• CLIMA DE EMPRESA •

Pensar en el bienestar de nuestros empleados significa ante todo garantizar la máxima seguridad en el trabajo y promover un estilo de vida saludable. En línea con estos valores, les ofrecemos incentivos para vivir en un entorno libre de humo, asistir a cursos de inglés, realizar viajes educativos y ofrecemos ayudas para el cuidado de los niños.

LOS VIÑEDOS

TREBBIANO

La historia del Trebbiano de los Abruzos se remonta a tiempos muy antiguos: su aparición en Italia data de hace más de 2000 años. Fue mencionada por primera vez por el historiador romano Plinio, que habla de un "vinum trebulanum" producido en las mismas tierras que hoy corresponden a los Abruzos. Es una de las variedades más populares entre los viticultores italianos y también una de las más cultivadas en todo el mundo. Además de vino, con sus uvas se elaboran el tradicional vinagre balsámico y, en Francia, el exquisito coñac.

PECORINO

El Pecorino es una variedad de uva blanca típica de las regiones italianas bañadas por el mar Adriático, y de los Abruzos en particular. Se cree que se llama así por ser el tentempié favorito de los rebaños de la zona durante su bajada al valle. Cultivada desde hace siglos, su modesto rendimiento ha hecho que fuera suplantada, hasta casi desaparecer, por variedades más productivas como el Trebbiano.

CHARDONNAY

Variedad de uva internacional por excelencia, la Chardonnay es una de las más cultivadas del mundo. En los Abruzos, se cultiva en suelos calizos desde hace más de 350 años. Dado que la piedra caliza se compone principalmente de fósiles de vida marina, acumulados durante milenios en el lecho de antiguos mares, podrá literalmente percibir el sabor de nuestro Terroir en cada sorbo.

PINOT GRIS

De esta variedad de uva, la Pinot Gris, descienden algunos de los blancos más célebres de nuestro panorama vinícola. Pariente lejana de la Pinot Noir, es una uva de color gris azulado, tal como sugiere su nombre. El término francés "Pinot", por su parte, significa "pequeña piña" debido a esa inconfundible forma que le confiere la disposición de sus bayas a los racimos de esta variedad de uva.

SANGIOVESE

Omnipresente en la península, el Sangiovese es a Italia lo que el Cabernet a Francia. Padre de los vinos tintos italianos más prestigiosos, sigue demostrando sus grandes virtudes en las distintas variedades clonales, sobre todo en las del centro de Italia. Para primar su calidad, los rendimientos deben calibrarse cuidadosamente: de hecho, las vides de las que procede son notoriamente de las más vigorosas.

MONTEPULCIANO

Sus orígenes están suspendidos entre la tierra y el cielo. Como uva de montaña, el Montepulciano nació de hecho en el macizo de la Majella, conquistando pronto toda la franja adriática del país. Todo en este vino refleja sus raíces: es salvaje, grandioso, intenso, misterioso, penetrante. Matices de moras húmedas y reminiscencias de sotobosque culminan en un triunfo de notas cálidas y afrutadas de un protagonismo inigualable, de las que brotan toques de cereza negra y especias.

VINOS

Logo-Orizz-dark
AVT srl – 65014 Loreto Aprutino (PE) – Italy Tel. +39 085.8289039 – info@collecorviano.it

Copyright 2021 Colle Corviano

A CAMPAIGN FINANCED ACCORDING TO EC REGULATION N. 1308/13